PASEANDO
POR PARIS
SILVIO
H. COPPOLA
Miembro
del Foro Argentino de la Deuda Externa
Foro
Regional La Plata, Berisso y Ensenada
En el centro Silvio Coppola y otros miembros del Foro.
En inuguración Plazoleta Alejandro Olmos (foto de archivo)
El
señor Ministro de Economía, llevando a cuestas una de sus mayores
preocupaciones, que es hacerse el pibe, partió
hacia Europa, con una nutrida delegación, en la que figuran de
manera destacada el Secretario de Finanzas y el Primer Adelantado al
respecto, el ex ministro Hernán Lorenzino. Este último,
está a cargo de la flamante organización, rentada por supuesto,
llamada “Unidad
de Renegociación de la Deuda”. El
título no admite distinciones entre las diversas deudas que agobian
al país (pensar que durante el tan criticado gobierno de Isabel,
la deuda
externa en su totalidad, no
alcanzaba ni tan siquiera a la mitad de lo que hoy en día se paga
anualmente, sólo en concepto de intereses), pero lo que se busca
ahora por parte del gobierno nacional, es arreglar la
deuda con el Club de París, que fuera contraída en su mayor parte
durante el gobierno de facto de 1976 o sea pasible de ser cuestionada
en su legalidad. Pero eso no importa. La cuestión es arreglar,
pues ese arreglo es
una de las exigencias de las finanzas internacionales y en su momento
del Premio Nobel de la Paz (sí, claro. Obama), más las componendas
por los reclamos en el CIADI, más el pago a los fondos
buitres,para
permitirle al país volver al mercado
internacional de capitales al interés que sea, evitando
el peligro ante la falta de divisas, de una nueva cesación
de pagos o default.
O sea algo así como el cuento de la buena pipa. Pagar algo, para
tomar nuevas deudas para pagar viejas deudas. Y todo en aumento.
La
obligación con esta asociación llamada Club de París, sería de
6.700 millones de dólares, pero si se adosan intereses normales,
punitorios, etc., los acreedores la han llevado a cerca de los diez
mil. Total 3.300 millones de dólares, a un país tan endeudado como
el nuestro, le es una insignificancia.
El
camino está señalado y de alguna manera se arreglará el pago, pues
si no se hace, más la solución en los otros cuestionamientos, el
camino del gobierno es sólobarranca
abajo y
sus días están contados, con posibilidades de repetirse la crisis
de 2001. La delegación está suficientemente consciente de ello y es
un incentivo más para su mayor esfuerzo. Seguramente también,
cualquier modesta comisión que se le reconozca por el éxito del
trámite.
SILVIO
H. COPPOLA
Miembro
del Foro Argentino de la Deuda Externa
Foro
Regional La Plata, Berisso y Ensenada
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